Asegura que en tres años, el equipo de Barreda se gastará 1,4 millones de euros en «comidas, cenas y saraos»
El Partido Popular criticó ayer que la Junta «está a punto de entrar en quiebra» y «están en riesgo» las nóminas de los trabajadores y, pese a ello, «derrocha» dinero en cuestiones de «protocolo, comidas, cenas y saraos» y se ha gastado 1,4 millones de euros desde el año 2009.
En rueda de prensa, la portavoz del PP en Castilla-La Mancha, Carmen Riolobos, preguntó al Gobierno regional cuántas personas están autorizadas a pagar con tarjeta de crédito, cuánto se gastan al año y en qué conceptos, y argumento que pagar con tarjeta de crédito «no es ilegal» pero sí es «vergonzoso» gastarse en protocolo 1,4 millones de euros en tres ejercicios. «Barreda no paga y además derrocha con tarjetas de crédito. Está a punto de entrar en quiebra nuestra economía, en suspensión de pagos, y están en riesgo las nóminas de los trabajadores», denunció Riolobos. Según sus datos, en 2009 se gastaron 487.250 euros a gastos de protocolo, en 2010 otros 474.770 euros y este 2011 están presupuestados 428.000 euros. Citó el diferente endeudamiento entre las comunidades de Castilla-La Mancha y Cataluña, mayor en el primer caso, y subrayó la «falta de liquidez y tesorería» del Gobierno de Castilla-La Mancha y el alto número de colectivos y empresas que trabajan para la Junta «y se quejan de que no cobran desde hace meses».
Riolobos aseguró que la «preocupación» del PP es que «peligran» los servicios sociales, sanitarios y educativos y denunció que algunas asociaciones de discapacitados han recibido la notificación de que este año no habrá dinero para talleres de empleo.
También citó colectivos de Atención Primaria que «se quejan» de que no les pagan los desplazamientos y otros sectores como transportistas, contratistas, servicios de ambulancia, residencias de mayores y servicios de limpieza «que no cobran o cobran fatal».
Según la portavoz regional del PP, «es un nivel insoportable de gasto» el que tiene la Junta que se suma a los edificios y mobiliario «carísimos» acometidos en los últimos años, como el Palacio de Fuensalida, la Consejería de Sanidad, Gicaman y Geacam en Cuenca.
http://www.laverdad.es