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Los trabajadores forestales pedirán a Tragsa recuperar sus condiciones

Desde el sindicato mayoritario en las provincias de Ciudad Real y Toledo, con más de cien afectados, se ha convocado una semana de concentraciones, desde el lunes, en Ciudad Real

Los trabajadores de prevención y extinción de incendios forestales, de los parques nacionales de las Tablas de Daimiel y Cabañeros en la provincia de Ciudad Real y de los Quintos de Mora, en Toledo, solicitan, a través del sindicato mayoritario que les representa, CGT, que la empresa pública Tragsa les devuelva sus condiciones laborales como profesionales de este sector contra los incendios.
En concreto, la situación afecta a cerca de ochenta trabajadores de Ciudad Real y unos veinticinco de Toledo, los cuales, están llamados a concentrarse desde este lunes 23 de mayo y hasta el viernes 27, frente a las puertas de la empresa Tragsa en Ciudad Real, ubicada en la calle Italia, desde las nueve de la mañana hasta las nueve de la noche.
Isaac Viñas, responsable de CGT bomberos forestales indicaba a este diario que los trabajadores de prevención y extinción de incendios forestales han pasado ya por «muchas vicisitudes», estando incluso dentro del convenio del campo en muchas de las ocasiones, durante periodos de tan solo tres meses. Con el paso de los años se aumentaron las contrataciones y las condiciones laborales, consiguiendo que se aboliera el convenio del campo de la actividad de incendios. 
Y es que estos trabajadores son especialistas forestales, los conductores de la autobomba, los encargados de las emisoras o los vigilantes apostados en las torretas, entre otros.
Recuerda que a raíz del incendio de Guadalajara, parte del operativo pasó a formar parte de la empresa Geacam, otro, se quedó en los parques nacionales y en estos casos concretos, la empresa adjudicataria que presta los servicios, es Tragsa. 
Cuando en el mes de septiembre se firmó el convenio regional de incendios forestales, donde se aglutina a todo el personal, la sorpresa fue que Tragsa les pasó a este grupo de profesionales al convenio general.
En este punto, muchas de las reivindicaciones que en su día se habían conseguido arañar, se quedaban colgadas, perdidas.
En este sentido, desde CGT lo que se quiere es que «se aplique el convenio general de Tragsa pero también el del convenio de incendios», en el cual sí querían recogidas sus categorías profesionales o los horarios, por ejemplo.
En este sentido, sería el propio Ministerio de Medio Ambiente quien debiera tomar cartas en el asunto y hacer «rebobinar» a Tragsa. Decía Viñas, que de no ser así «auguramos que va a ser un verano conflictivo», sobre todo, cuando la campaña de incendios se inicia el próximo día 1 de junio. 
Fuente: La tribuna

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TRAGSA debe readmitir a siete trabajadores de la BRIF despedidos en Cuenca

El Juzgado de lo Social nº 1 de Cuenca ha declarado nulos los despidos de siete trabajadores de la Brigada de Refuerzos contra Incendios Forestales (BRIF) de Cuenca gestionada por la empresa TRAGSA. Tendrán que readmitirlos en sus puestos de trabajo en el plazo máximo de diez días, aunque la sentencia no es firme.
 
La sentencia condena a TRAGSA a la "readmisión inmediata de todos los trabajadores no contratados, en las mismas condiciones que regían hasta la fecha del despido".
Además, el juez insta a la empresa TRAGSA a abonar los salarios que los siete trabajadores han dejado de percibir hasta la reincorporación al trabajo, considerando que la empresa tomó una "decisión caprichosa, arbitraria y sin justificación, e incurre en un acto de vulneración de derechos fundamentales".
 
Los hechos se remontan a finales del pasado año, cuando 39 trabajadores de TRAGSA solicitaron pasar de la categoría de fijos discontinuos a  la de fijos. Al no atenderse esta reivindicación, presentaron una demanda.  En esta situación, la propia sentencia reconoce ahora, que TRAGSA instó a los empleados a retirar la denuncia para recuperar sus puestos de trabajo, algo que hicieron todos menos un delegado sindical, siendo contratados todos excepto siete, con la intención de amedrentar al resto de trabajadores de la plantilla y un aviso al resto de las BRIF de España, punto que también ratifica ahora la sentencia. En este sentido, remarca que cuatro de los siete trabajadores despedidos son capataces y están en situación de "líderes de grupo", y establece que no se les contrata "con el fin de escarmentar a los trabajadores por su actitud reivindicativa y con el único fin de que la reivindicación desaparezca".

Fuente:
 http://www.vocesdecuenca.com
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